Con el nuevo proceder del campeonato implatado por Luis Rubiales, los equipos con menos repercusión tendrán la oportunidad de estar en el centro de las miradas. Eso sí, para poder albergar los eventos, tienen que cumplir con las exigencias de seguridad de la RFEF.
Esto puede ir desde el tipo de césped a desperfectos en la infraestructura del edificio del terreno de juego. Ello ha 'echado para atrás' ya tres campos: el de la Peña Azagresa, el del Intercity y el del Bergantiños. De ahí que hayan tenido que buscar otras soluciones.
Seis clubes tampoco jugarán en casa. El Atlético Antoniano se enfrentará al Betis en Sevilla; el Melilla recibirá al Levante en el Municipal Álvarez Claro; El Palmar hará lo propio con el Getafe en la Nueva Condomina de Murcia; el Comillas y la SD Logroñés recurrirán a Las Gaunas para Villarreal y Eibar...
El Becerril se irá hasta la Nueva Balastera de Palencia para jugar contra la Real Sociedad; el Bergantiños, al Municipal de Riazor; el Intercity, en el Martínez Valero, y y la Peña Azagresa, a La Planilla, en Calahorra. La cantidad de movimientos ha llamado mucho la atención.