El equipo chino no dudó en pagar más para recuperar al futbolista que había vendido bien el verano anterior. Esperaba que fuera de nuevo el líder del equipo y eso está haciendo el centrocampista brasileño, todo un líder y con un rendimiento que opta al del mejor futbolista de la competición a final de temporada.
Sus números hablan solos tras 15 partidos con el Guangzhou: once goles y seis asistencias. Es decir, su impacto en el juego arroja más de un gol cada partido para su equipo.
Obviamente, la Liga China no es comparable a la española. Aun así, Paulinho está dejando claro que tiene madera de líder juegue donde juegue.
Ernesto Valverde siempre se opuso, desde la valoración deportiva, a la marcha del centrocampista brasileño. No obstante, acabó imperando la lógica económica. Arturo Vidal, sin embargo, está bastante alejado del rendimiento que dio Paulinho.