Frente al potencial local de hace un año, el Alcoyano solo ha ganado un partido ante su público y ya acumula dos derrotas en esta campaña.
El exjugador del Lleida reconoció que el traspiés del miércoles en la Nova Creu Alta de Sabadell, que rompió una racha de dos victorias consecutivas, supone "otra piedra en el camino", aunque no cree importante que otra vez el equipo figure a cuatro puntos del descenso.
"Era clave ganar este partido, no se dio y ahora no podemos lamentarnos. Hemos de seguir siendo fieles a nuestro estilo porque el equipo ha dado un salto cualitativo en las últimas jornadas. Fastidia que tras una segunda parte de asedio total, perdamos 2-0. Si llegamos a empatar, estoy convencido de que ganamos", dijo.
El central, que tiene muchas opciones de adelantar su posición al centro del campo el domingo ante el Badalona por la sanción de Javi Ribelles, no espera a un rival que solo venga a defenderse.
"Es verdad que defensivamente el Badalona es un equipo muy sólido, pero arriba cuenta con futbolistas de mucha calidad. Lo mejor para nosotros es que no hemos de esperar una semana para quitarnos la espina de la derrota del miércoles", concluyó.