Pep Guardiola nunca ha perdido, como entrenador, cuatro partidos oficiales seguidos sin siquiera ver puerta. Esto pudo suceder en la segunda jornada de la Premier League, cuando su Manchester City se veía las caras con el Norwich. No acaeció finalmente porque sus 'sky blues' se impusieron por 5-0 con goles de Krul -en propia-, Grealish, Laporte, Sterling y Mahrez.
Antes, el grupo había perdido contra el Tottenham Hotspur por 1-0 en el primer envite del curso en el apartado doméstico, por 1-0 frente al Leicester en el choque por la Community Shield y por 0-1 con el Chelsea como rival en la final de la Champions League de la temporada pasada. Hubo victorias que intercalaron estos resultados, aunque se dieron en citas amistosas.
El triunfo ante los 'canaries' se antojaba fundamental para recuperar buenas sensaciones. Caer en el estreno con los 'spurs' no sentó nada bien a un grupo que ha de opositar a ganar todas las competiciones de las que forma parte. De hecho, es el vigente campeón de la Liga Inglesa y subcampeón de Europa.
La 'manita', además de suponer que aquella racha negativa inédita de Pep Guardiola deberá esperar, abrigó una buenísima noticia para el Manchester City: el debut goleador de Jack Grealish. Es una de las grandes apuestas de la directiva para esta temporada y es clave para conseguir los objetivos que encaje bien en el equipo.