Como era de esperar, el recibimiento a Cristiano Ronaldo en el Wanda Metropolitano fue el que se hace a un énemigo número uno. El portugués, la gran amenaza para el Atlético en octavos de Champions.
Si bien Cristiano tuvo una llegada tranquila a Madrid y a su hotel de concentración, la cosa cambió en el momento en el que pisó el terreno de juego del conjunto rojiblanco, su gran rival en Madrid hasta hace apenas unos meses.
Así las cosas, la Juventus saltó en primer lugar a calentar al Wanda Metropolitano, lo que provocó los silbidos de los escasos centenares de aficionados que en ese momento se encontraban en las gradas.
20 de febrero de 2019