El Tottenham perdió una oportunidad de oro para seguir en la lucha por un campeonato que parece, tras el pinchazo, en manos de dos conjuntos: el Manchester City de Guardiola y el Liverpool de Klopp.
Nada más terminar el partido, el entrenador del conjunto londinense se marchó hasta dentro del campo para hablar con el colegiado del encuentro, Mike Dean, y mostrarle su enfado por la actuación.
Pochettino le recriminó una falta previa al córner que dio lugar al segundo tanto del Burnley, obra de Barnes, que dio la victoria al cuadro local frente a los del técnico argentino. Sin embargo, Dean quiso quitárselo de encima a la vez que le decía: "Muévete, Poch".
23 de febrero de 2019
Mike Dean es uno de los árbitros más mediáticos de la Premier League. No es la primera vez que el colegiado es protagonista en una refriega precisamente ante el conjunto al que acusan ser aficionado.
Justo después, en rueda de prensa, Pochettino afirmó que había "cruzado la línea" tras su furiosa reacción al término del partido. "Ahora que estamos más relajados, no podemos culpar a nadie, solo a nosotros mismos", afirmó.