Italia no estará en Rusia. Tampoco estará Holanda. Ni Chile. Selecciones que en un principio iban a luchar por el título no estarán siquiera presentes en el campeonato que tiene lugar cada cuatro años.
Ausencias notorias e importantes que restan cierto valor al Mundial de Rusia. Selecciones que arrastran a millones de personas y que tienen un peso muy importante dentro del panorama futbolístico.
Y la FIFA lo sabe. Por ello ha planificado una competición de 48 combinados nacionales que ofrezcan el mayor espectáculo posible. Quiere que el mundo se pare frente a sus televisores para admirar el mejor fútbol del mundo.
Tras las críticas recibidas en los últimos mundiales, espera atraer a un mayor número de aficionados aumentando el número de países participantes, evitando en buena medida la eliminación de grandes selecciones como las que se han producido para Rusia.