Diego Costa y Kevin Gameiro son dos delanteros muy distintos, pero ambos tienen algo en común: el interés del Atlético de Madrid por hacerse con sus servicios.
El hispanobrasileño tiene a su favor el buen recuerdo que dejó en el Calderón, y la sensación de que el Atlético 'se lo debe': nunca había estado tan cerca de volver como ahora, y puede parecer una jugada fea que cuando él pone todo de su parte para retornar el Atleti se lo pague fichando a otro.
Gameiro, por el contrario, no tiene esa presión. A sus espaldas, un historial intachable en el Sevilla. Nadie duda de su calidad a día de hoy.
Sin embargo, una cosa penaliza en gran medida el fichaje de Diego Costa: su precio. El Chelsea no se ha sentado a negociar. Simplemente ha dicho al Atleti que 60 millones no bastan. Eso supone que costará el doble, o más, que Gameiro. Punto para Kevin.
Sobre el césped son similares. Diseñados futbolísticamente para aprovechar los espacios y destrozar a las defensas rivales con sus cabalgadas potentes. Pero Gameiro tiene algo que no tiene Diego Costa, el desborde y el juego en el área. Costa es más potencia pura.
En el terreno de juego son similares hasta que se 'calienta' el partido. Diego Costa es un volcán que está a punto de estallar aunque sea un partido benéfico. Gameiro es más tranquilo, pero se le ha visto perder los estribos en alguna ocasión. Sin embargo, el carácter del de Lagarto, si es bien canalizado (o "bien" canalizado), puede ser la perdición de la defensa rival. Bien porque dé un extra que le haga imparable, bien porque la saque de sus casillas y fuerce amarillas casi sin proponérselo.
En el tema goleador andan parejos. Gameiro aún no ha alcanzado el mejor registro de Costa, precisamente alcanzado como rojiblanco, pero esta temporada ha marcado una cantidad similar a la de Griezmann.
En definitiva, tenemos una comparativa bastante igualada. Diego Costa es fuerza, carácter, pelea, 'cholismo' y gol. Todo ello a un precio desorbitado salvo que logre de alguna manera rebajarse, algo muy, muy poco probable.
Kevin Gameiro es temple, velocidad, astucia y gol, por el módico precio de 30 millones, aproximadamente. Más barato e igualmente eficiente, pero sin el toque de nostalgia que aporta el hispanobrasileño.
Difícil decisión la que tiene ante sí el club rojiblanco. Cuando parecía que sería Gameiro el elegido, hoy cambió todo. Costa dejó entrever que se marcha, y Kevin fue titular contra el Mainz.