Después de toda una vida en el Bayern de Múnich, el austriaco David Alaba decidió abandonar el conjunto bávaro para iniciar una nueva aventura en el Real Madrid. Su historia con el conjunto blanco comenzó con un beso al escudo durante su presentación que generó mucha polémica en Alemania.
Sobre la misma quiso hablar en 'Bild' el futbolista 'merengue', que quiso dejar bien claro que, pese a su gesto con su nuevo equipo, también sigue amando al equipo que le dio todo en la Bundesliga.
"El beso al escudo no significa que ya no ame al Bayern. Simplemente fue un día de lo más especial para mí. Fue el comienzo de una nueva etapa, pero para nada quería provocar a los aficionados del Bayern, donde pasé 13 años maravillosos. Siempre estaré agradecido a la afición y al club por darme la posibilidad de desarrollarme como persona y jugador. Múnich se convirtió en mi segunda casa. No quise herir sensibilidades", apuntó Alaba.
De igual forma, en dicha entrevista, el jugador habló sobre cómo ha sido su reencuentro con Carlo Ancelotti en el Madrid, además de valorar la llegada de su compatriota Marcel Sabitzer al Bayern de Múnich.
"El trabajo con Ancelotti es fantástico. En Múnich ya mantuvimos una relación muy buena y las ganas y la ilusión que transmite en cada sesión de entrenamiento no han cambiado. ¿Sabitzer? Es un gran tipo y un grandísimo jugador. Tiene todo lo que necesitas para ser un jugador 'top' a nivel mundial. Creció en el RB Leipzig y me alegra mucho, también como austríaco, que se haya decidido a dar este paso. Le dará mucho al Bayern", sentenció.