El bueno de Zhang casi fue más noticia por lo tenso que se puso el entonces entrenador del Rayo, Paco Jémez, cuando se lo 'colaron' en la plantilla que por su desempeño sobre el terreno de juego.
Porque jugar, lo que es jugar, Zhang Chengdong jugó bastante poco en el Rayo. Exactamente 223 minutos repartidos en cuatro partidos, tres de Copa y uno de Liga. Concretamente, ocho minutos en la visita del Atlético de Madrid a Vallecas, hace exactamente tres años.
Aquel 30 de diciembre Zhang se enfundaba por penúltima vez la camiseta franjirroja. Sería en la Copa, de nuevo contra el Atlético, cuando jugase sus últimos 66 minutos como rayista, a principios de enero de 2016.
Entonces Zhang hizo las maletas y se volvió a China. Nunca tuvo problemas con Jémez, el técnico rayista estaba enfadado con la directiva, no con el futbolista. La falta de minutos frustró la cesión.
Zhang se volvió a China siendo el primer futbolista de ese país en jugar en la Primera División Española. Un año más tarde se convertía en el traspaso más caro de un jugador chino, al pagar el Hebei China Fortune 20 millones al Beijing Guoan.
Y allí, en el Hebei, sigue Zhang. Se ha convertido en un puntal en el ataque del equipo, y en un habitual de las convocatorias de la Selección China. Aquel futbolista que pasó sin pena ni glora por el Rayo ahora vive la plenitud de su carrera en su China natal.