Cuando Xavi Hernández anunció que dejaría el Barcelona a final de temporada, Rafa Márquez, técnico del filial, tardó unas horas en dejar caer que a él le gustaría tomar las riendas del primer equipo. Lo hizo en una rueda de prensa pospartido tras verse las caras con el Fuenlabrada. Esto no sentó nada bien en la cúpula de Joan Laporta, que, según el diario 'Sport', ha vuelto a enfadarse con el mexicano, esta vez por publicitar casas de apuestas en sus redes sociales.
El contenido que compartió con sus seguidores ya no se puede encontrar porque lo ha tenido que eliminar. Adrià Soldevilla, en el programa 'Què t'hi Jugues', de la cadena 'SER', contó que el propio club le obligó a borrarlo porque, aparte de vulnerar el reglamento interno de la entidad, podía componer un caso de conflicto de intereses. Aun así, el efecto recaerá sobre su continuidad en el B de la Ciudad Condal. Acaba contrato en verano y los mandamases de Montjuïc no ven especialmente bien renovarlo tras estos episodios.
Lo llamativo es que, en el seno 'culé', están contentos con su rendimiento meramente deportivo. Son estos rifirrafes fruto de su actitud los que están poniendo en riesgo la ampliación de su trayectoria en el conjunto catalán. En Primera Federación, los suyos marchan en la 4ª posición de la tabla solo por detrás del Gimnàstic de Tarragona, la Ponferradina y el Deportivo de La Coruña. Además, no pierden desde el 13 de enero ante el Arenteiro.
Rafa Márquez empezó a trabajar en el filial del Barcelona a mediados de julio de 2022, así que este puede ser el fin a una estancia de dos años que es la primera de su trayectoria como entrenador. En caso de que se despida en verano, como Xavi, no le faltarán potenciales destinos en su país natal, México, donde se le tiene en alta estima, si bien esto es tan solo una cábala: aún no se ha filtrado nada en la prensa azteca.