Muchos le daban por traspasado definitivamente, pero finalmente Rafinha no convenció en el Inter y acabó volviendo al Barcelona al final de la temporada 2017-18 tras una poco satisfactoria cesión de medio año.
Sus problemas físicos le hicieron perder el tren de un Mundial en el que tampoco la 'Canarinha' realizó una actuación estelar. Mientras, él regresó a los entrenamientos con el Barça, siempre con el objetivo de encontrar un nuevo club o de convencer a Ernesto Valverde, un técnico que tampoco pudo verle mucho en acción, pues Rafinha estaba lesionado de gravedad cuando el 'Txingurri' aterrizó en la Ciudad Condal hace un año.
Con el Barcelona necesitado de dinero para acometer fichajes, la venta de Rafinha se antojaba prioritaria, pero lo cierto es que no hay ofertas firmes por el pequeño de los Alcántara. Así, Rafinha se ha puesto como objetivo la gira por los Estados Unidos para convencer a Valverde.
Hasta volver de Norteamérica el centrocampista no decidirá su futuro y espera que tras lo visto allí el club cambie de opinión. Tal vez Valverde encuentre en Rafinha entonces el centrocampista que el Barça tanto anhela.
Sin embargo, más allá de una falta de confianza en el futbolista, da la sensación de que lo que tiene sin casi opciones de continuar al brasileño en el conjunto azulgrana es su propensión a las lesiones. Algo que, con trabajo y continuidad, Rafinha quiere mostrar que ya es cosa del pasado, aunque en la sesión de este miércoles el jugador realizó trabajo específico por leves problemas físicos.