"No se puede estar satisfecho. Con todo el respeto que se merece Cortuluá, debimos tomar el mando del partido. De verdad que la sensación… Es mejor no hablar", expresó Rueda en la rueda de prensa posterior al partido.
El técnico no quiere vivir del pasado: "Tenemos la obligación, es el peso de esta camiseta. El 27/07 ya pasó hace rato. No podemos vivir de la historia, hay que construirla partido a partido. Tenemos que aprender a ser ganadores, no ser conformistas".
Rueda también apeló al buen hacer de su rival. "El mérito es del Cortuluá por su estructura, se tomaron confianza e hicieron un juego muy inteligente. Lo de Mina fue extraordinario, es un arquero con explosividad y reacción en corto extraordinaria", manifestó.