El coronavirus ya es uno más en nuestra sociedad y nuestro deporte. Su presencia ha empezado a condicionar eventos, ligas, calendarios... y ya hasta se mete en los saludos iniciales.
Los jugadores juveniles de Benfica y Liverpool, antes de arrancar su encuentro de la UEFA Youth League, protagonizaron un pasamanos más que curioso. Para unos será ridículo. Para otros, una medida necesaria.
Y es que cambiaron la costumbre de estrechar o chocar la mano por un gopecito codo con codo para evitar el contacto directo entre futbolistas y árbitros.