El guardameta fue cuestionado sobre este tema debido a los incidentes acaecidos en el PAOK-Olympiacos del miércoles, en el que, tras una decisión del árbitro, un centenar de aficionados saltaron al campo para agredir y lanzar objetos al cuerpo arbitral.
"Por desgracia ya parece habitual que ocurran cosas así. Lo hemos visto otras veces y luego lo asimilas como algo normal cuando en realidad no lo es. Al cabo del tiempo te pasan cosas así y uno no le da tanta importancia, pero lógicamente se la tenemos que dar", aseguró el español.
También destacó que los jugadores no pasan miedo ya que refugian en el vestuario "a la mínima reacción extraña de la afición". Pero insistió que, pese a ser una situación que se repita continuamente, es algo "que no es natural ni agradable".