Acabó la temporada para el Real Madrid, y ha llegado el momento de hacer balance. Por ejemplo, con la eterna comparación entre Vinicius y Rodrygo. Una vez más, cuando uno sube, el otro baja.
Ha vuelto a ocurrir. Mientras Vinicius se pasó todo el partido en la grada del Etihad, sin salir siquiera a calentar, Rodrygo era titular y disputaba todo el encuentro. Ha sido el punto y final a una temporada en la que sus caminos se han estado entrecruzando una y otra vez.
Vinicius ha jugado más partidos y más minutos (exactamente nueve partidos y 121 minutos más), pero Rodrygo ha disputado los más importantes, los de Champions. Zidane confía en él, más desde luego que en Vinicius.
El problema de Vinicius sigue siendo el mismo de siempre, su falta de gol. Una falta de gol que se agrava en comparación con su compatriota Rodrygo, quien en menos minutos ha marcado más goles que él.
Rodrygo cada vez le tiene más ganada la partida a Vinicius, y solo la confianza ciega de Zidane en él evita que caiga en el olvido.