Rubiales iniciará este lunes su segunda etapa como presidente

Luis Rubiales renovará este lunes la confianza de la Asamblea para asumir su segundo mandato como presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), en un momento en el las competiciones se reanudan condicionadas por la pandemia y en el que la distancia con LaLiga no deja de agrandarse.

En el cargo desde el 17 de mayo de 2018, Rubiales (Las Palmas, 1977) concurre como candidato único para su primer mandato completo, ya que el que expira empezó cuando impulsó una moción de censura a la directiva que encabezaba Juan Luis Larrea por la suspensión de Ángel María Villar, en plena instrucción de la 'Operación Soule' todavía sin cerrar.

Entonces, después de jugar en clubes como Motril, Lleida, Xerez o Levante y de haber presidido la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) desde 2010, consiguió 80 votos frente a 56 y se convirtió en el vigesimosexto presidente de la RFEF.

Ahora, y tras la renuncia de Iker Casillas a presentarse, por entender que "no es un proceso justo", Rubiales lo hace con más de cien avales de la Asamblea (140), que se reunirá presencialmente en la Ciudad del Fútbol, con estrictas medidas de seguridad como la toma de temperatura de los asistentes a su llegada.

La pandemia ha marcado los últimos meses de la gestión de Rubiales, en los que la RFEF ha reordenado las competiciones que no pudieron completar la temporada pasada para el inicio de ésta y sigue en contra de la pretensión de LaLiga para que haya partidos los lunes y los viernes.

Pese al acuerdo de abril para que la Primera y la Segunda división pudieran acabar el asunto sigue judicializado. Ambas partes se verán en unos días otra vez en el juzgado que resolverá sobre la petición de medidas cautelares hecha por LaLiga contra la sentencia que dio la razón a la RFEF e impide que se jueguen partidos en ambas fechas.

También el caso Fuenlabrada, por los positivos de COVID-19 que sufrió la plantilla del equipo en la última jornada de Segunda ante el Deportivo y sus consecuencias, ha aumentado más la brecha con la patronal y su presidente, Javier Tebas, con la que solo acordó un nuevo convenio de coordinación de competencias con la mediación del Consejo Superior de Deportes (CSD).

El "cambio imparable" que Rubiales ofreció cuando llegó a la presidencia no se ha producido en las relaciones entre la RFEF y LaLiga pero sí en muchas otras cosas.

Con su máxima de dinamizar la gestión y optimizar recursos y competiciones al llegar creó un área de integridad; apostó por la transparencia -su sueldo de 160.000? anuales se aprobó en una asamblea- e impulsó ayudas para la profesionalización de los clubes de 2a B y 3a (Programa Impulso 23) y el fútbol femenino. Los árbitros tienen desde esta temporada un contrato de trabajo y Seguridad Social.

En 2018 la Supercopa se jugó fuera de España por primera vez, en Tánger, y la siguiente edición, con nuevo formato de final a cuatro, en Jeddah (Arabia Saudí) dentro de un acuerdo que incluye otras dos más.

En el capítulo deportivo la selección pasó una situación muy convulsa con el despido de Julen Lopetegui -en Rusia en vísperas del Mundial 2018- por su fichaje por el Real Madrid, la repentina marcha de Luis Enrique por la enfermedad y fallecimiento de su hija y su regreso ocho meses después, con acusaciones de deslealtad a quien fue su segundo y le sustituyó temporalmente, Robert Moreno.

La calma parece haber vuelto y los equipos inferiores del fútbol español han celebrado en estos dos años los títulos Europeos Sub 21 y Sub 19, además de la primera participación de la absoluta femenina en un Mundial el año pasado y el título de campeón del mundo sub'17.

Otro asunto pendiente de juzgados es el fútbol sala, después de que la RFEF asumiera la organización de las competiciones en contra de la Liga, que reclama su profesionalización y ha denunciado el caso.

La votación de este lunes se celebra después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) concediera a la RFEF una medida cautelar contra la resolución del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) que anuló su convocatoria por defecto de forma tras estimar varias denuncias de clubes y de la territorial de Madrid.