El Espanyol apostó por Keidi Bare en su camino por volver a Primera División. El ex del Málaga atendió a 'AS', dio algunas claves de la temporada y contó algunos de sus secretos que le han llevado a ser la persona de hoy día.
"En la vida siempre hay que luchar para conseguir las cosas porque nadie te regala nada. También en el fútbol. Y, sobre todo, ser humilde. Yo he luchado un montón para llegar aquí", reconoció.
Nació en 1997 en plena rebelión en Albania y con la guerra de Kosovo asomando: "Mi padre me explicó que fueron tiempos duros. Lo pasaron muy mal y siempre doy gracias a Dios que estén con vida. La lucha viene de familia porque mi padre fue muy pesado conmigo para que llegara lo más lejos posible en el fútbol".
"Sacrifiqué muchísimo por el fútbol. Mi niñez sin amigos y la familia para llegar donde estoy ahora. Yo no sabía lo que era tener amigos, no salía a jugar con otros chicos porque todo lo era el balón. Lo pasé muy mal, fatal, por estar lejos de mi familia a los once años, pero debía pensar en mi futuro", recordó. Con solo 15 se fue a la cantera del Atleti.
De allí pasó al Málaga a los 21. En la Costa del Sol se formó y dio el salto al fútbol profesional y ahora en el Espanyol se ha convertido en pieza fundamental para Vicente Moreno.