A pie de campo comparecieron Willian José y Florentino Luís, y luego, en la sala de prensa del Villamarín, lo hicieron sus entrenadores, Manuel Pellegrini y Míchel. Las sensaciones de unos y otros, totalmente opuestas.
El delantero brasileño del Betis expresó cierta sorpresa por lo bien que ha empezado la temporada para él (cuatro goles en cuatro partidos). "No esperaba este inicio, mi intención era adaptarme lo más rápido posible y entrenar fuerte con mis compañeros", empezó diciendo.
"A algunos les conocía, pero al principio siempre es complicado entender lo que necesita el equipo. Muy contento con mi inicio y espero seguir así", añadió el ariete.
Agradeció, a continuación, el apoyo de la grada. "Con esta afición es más fácil, siempre nos apoyan y eso es muy importante. Los delanteros tenemos que meter goles, si no es complicado. Espero que sean más", dijo.
"Tenemos muchas ocasiones de gol pero las fallamos. Creamos muchas y ojalá que sigamos así, metiendo dos o tres goles por partido porque es importante para todos", apuntó, al respecto de esa deuda con el gol que siempre se le supone al delantero.
Y acabó valorando lo que fue el primer triunfo sin conceder un gol en contra. "Es importante ir sumando. En casa tenemos que sumar siempre los tres puntos. En el último partido, en el último minuto, encajamos un gol que no tenía que haber llegado, pero a seguir", sentenció.
Pellegrini, por su parte, aplaudió el compromiso de su equipo. "El equipo está pasando un buen momento ofensiva y defensivamente. Claudio Bravo prácticamente no tuvo trabajo hasta el final", dijo, al arrancar su comparecencia.
"Venimos marcando dos o tres goles por partido, nos hubiera gustado asegurar antes, pero lo importante es que se cree ese volumen ofensivo y que la distancia entre las líneas sea la adecuada. Un partido muy completo del equipo", continuó.
Destacó también el hecho de no haber encajado. "La diferencia con el Espanyol es que no nos hicieron goles. Tuvimos muchas ocasiones también, pero hoy no encajamos. Venimos jugado así desde hace tiempo, es un fútbol netamente ofensivo. Cuando se pierde el balón lo recuperamos todos", explicó.
"Hace tiempo que cuesta que superen a este equipo, tres derrotas muy ajustadas este año, pero tenemos un plantel que como les he hablado tantas veces se necesita ese compromiso, ilusión y entrega para estar en tres competiciones", insistió Pellegrini.
El chileno quiso hablar de su Betis como un todo desde que llegase al banquillo. "Hicimos un muy buen partido, pero también lo hicimos ante el Espanyol y el Granada, de forma muy similar, con volumen ofensivo importante y pocas ocasiones en contra", dijo.
"Más que destacar un partido destacaría sobre todo una campaña, no solo la de este año, lo que conseguimos mejorar el año pasado tras un comienzo complicado. El equipo cree en lo que hace y tiene buenos jugadores", apuntó.
En el Getafe las cosas son bien distintas. Siete partidos, siete derrotas. Es el único club de Primera que todavía no ha puntuado. Míchel está en el alambre y, para colmo, parece haber problemas en el seno de la plantilla.
Al menos, eso es lo que se desprende de las declaraciones de Florentino Luís al término del partido. Le preguntaron por la marcha de Bordalás y él señaló al presidente. "Es una situación que es para la Dirección. A Míchel le conozco, estamos con sus ideas", espetó.
Sobre la situación deportiva, el portugués se mostró todavía esperanzado. "Creo que es cuestión de tiempo, vamos a cambiar los resultados, el equipo está trabajando muy bien, hacemos las cosas que nos pide el míster", comentó.
Y también habló de la falta de mordiente ofensiva de sus compañeros. "Es lo que dije al principio, creo que es cuestión de tiempo, vamos a seguir trabajando, estamos en una liga competitiva, hemos jugado contra un gran equipo como el Betis. El camino es seguir trabajando", dijo, para finalizar.
Míchel, en la sala de prensa del Villamarín, también fue sombrío. "No sé si realmente somos tan malos. Hemos perdido de todas las maneras, la mayoría de las veces jugando bien. Hoy hemos puesto el partido en el camino que quería el Betis. Teníamos que haber hecho el partido más largo", empezó diciendo.
Negó estar esperando su destitución, y aseguró estar comprometido con el equipo, decidido a buscar alternativas. "Mi intención es no bajar los brazos, aunque siete derrotas consecutivas son muy llamativas", advirtió.
"El Betis ha encontrado todas las soluciones que el partido requería, se ha aprovechado de errores que no te puedes permitir. No es fácil levantar el ánimo en esta situación", señaló, para finalizar.