Barcelona, Atlético, PSG... La Champions vuelve fuerte y muchos esperan una de esas noches mágicas europeas.
El Real Madrid gobierna con mano de hierro la que es su competición fetiche, ganando las tres últimas ediciones y cuatro en el lustro reciente, y los rivales amenazan su reinado en la era 'post Cristiano'.
"Este año toca Champions"
Los 'culés', entre ellos. El Barça se ha marcado como objetivo prioritario ganar la Copa de Europa. Ya avisó Messi en su primer discurso como capitán al afirmar que "este año toca Champions".
El Barcelona piensa que ya es hora de cambiar las cosas en Europa y apear al máximo rival del trono tras unos años decepcionantes.
Los azulgrana no se cayeron de las semifinales de la competición durante prácticamente una década, pero se vieron eliminados en las tres útimas ediciones en los cuartos de final.
El Barça solo ha ganado una Champions en siete años, la que conquistó Luis Enrique, mientras que en los anteriores había alzado tres.
A todo esto hay que sumar que la noche de Roma aún duele y hay obsesión en el club por volver a ser lo que era en Europa y borrar lo vivido en la capital italiana. No lo tendrá fácil, ya que está encuadrado en el mismo grupo que Inter, Tottenham y PSV.
Por lo pronto, los 'culés' afrontan este martes en casa, un fortín en Champions, el partido ante el PSV. Es a priori más fácil y solo vale la victoria. Valverde cuenta con Messi y Luis Suárez, que ha recuperado su olfato goleador.
La cuenta pendiente de los 'colchoneros'
El Atlético no ha empezado bien el curso. De hecho, ha cuajado el peor arranque de Liga con Simeone en el banquillo, pero el técnico 'pasa' de pesimismos en Europa.
La Copa de Europa es para los atléticos esa espinita clavada que empaña el resto de cosas buenas que pasan, el gran anhelo, el único título que aún se le resiste, la cuenta pendiente del 'Cholo'.
Y, además, esta Champions es la más importante para el Atleti, ya que tiene como aliciente que la final se juega en el Wanda Metropolitano.
Se ha convertido en obsesión desde que hace cuatro años tuvo lugar el cruel desenlace de la final contra el Real Madrid en Lisboa, con el 1-1 de Sergio Ramos en el minuto 93 y con el 4-1 de una prórroga a la que llegó exhausto.
Hace dos años, los atléticos sufrieron otro duro varapalo cuando los penaltis le apartaron del ansiado título ante el mismo rival en San Siro. Dos golpes de los que quizás nunca se han repuesto.
En Mónaco les espera el primer paso para llegar a esa final en su propio estadio, en el estadio Louis II, y Falcao, antiguo 'colchonero' y ahora rival, aunque cuentan con Griezmann como máxima estrella.
Tampoco lo tendrán fácil los rojiblancos, encuadrado en el grupo 1 junto al Borussia Dortmund y el Brujas, además del conjunto del Principado.
No hay excusas para el rey de Francia
El PSG tiene la vista fijada en la Champions. No le vale solo con ganar casi por sistema la Ligue 1, una competición en la que va como un tiro, sino que necesita reinvidicarse en Europa.
Un equipo que cuenta con Neymar y Mbappé como sus principales estrellas no puede limitarse a Francia y anhela trasladar sus éxitos a Europa. Para eso ha invertido en conseguir esta plantilla Al-Khelaifi.
El PSG tiene como mayor logro en la competición el haber sido semifinalista en 1995. No ha sido capaz de superar los cuartos de final en los últimos años. Lo han impedido Barcelona y Real Madrid, sus verdugos en octavos en las dos anteriores temporadas.
Todo lo que no sea al menos superar esa fase se considerará un fracaso y el conjunto francés vuelve con ilusión bajo el mando de Tuchel y señalado como uno de los grandes candidatos al título.
El club parisino ha quedado encuadrado en el grupo 3, con el Liverpool como principal rival, un Nápoles como tercer aspirante y el Estrella Roja, a priori el más débil.