Dyche se puso a los mandos del Burnley allá por octubre de 2012. Su experiencia al frente del Watford, de apenas una temporada, era su único aval. Había colgado las botas en 2007 y se fogueó en los banquillos de los 'hornets', hasta que el modesto Burnley le confió los mandos del primer equipo.
Se encontró un Burnley en media tabla del Championship, y en tres años lo subió a la Premier. Su paso fue efímero (ascendió en 2014 y descendió la siguiente temporada), pero eso no mermó la confianza de la directiva.
Tras un 'añito en el infierno', Dyche devolvió a los 'clarets' a la élite, y ha logrado que se aferren a la Premier.
Esta temporada está siendo el equipo revelación. El Burnley es séptimo, a dos puntos del Arsenal (aunque los 'gunners' aún tengan que jugar en St. James Park), y a ocho de la Europa League.
No es su objetivo, pero sigue siendo una posibilidad, lejana, a día de hoy. Porque jugando como juega el Burnley, nada es imposible.
Ante el Leicester, los chicos de Sean Dyche han logrado batir una marca que pusieron en el ya lejano 1968. En aquella temporada, en lo que aún se denominaba First Division, el Burnley logró enlazar cinco victorias consecutivas.
Con ésta, los 'clarets' han estado diez temporadas desde entonces en la élite, y no han vuelto a enlazar 5 triunfos seguidos hasta hoy. Otro éxito más en el historial de Dyche.