"Nos quedamos afuera los que vamos siempre, mientras tienen entradas muchos de los que no van nunca”, protestaron algunos de los perjudicados. Pese a que la organización organizó la tanda de entradas en dos rondas, una por la mañana y otra por la tarde, las 26.000 localidades disponibles volaron en menos de media hora.
El cabreo de parte de la hinchada 'xeneize' reside en el sistema de adjucación de las entradas. Un método que en ningún momento premió a aquellos hinchas más fieles, mientras que facilitaba la asistencia de aficionados 'golondrinas': un sector de seguidores que solo aparecen en los partidos importantes.
Un sistema de filtro que la dirección del club sí ejerció en el último 'Superclásico' del torneo local, pero que por motivos desconocidos para la hinchada no se ejecutó para la 'Superfinal'.
“Lo que sucedió con las entradas era previsible, no hay Bombonera que alcance”, declaró Angelici. Los asociados debían entrar en una web llamada soysocio.bocajuniors.com.ar, para habilitar el carnet por un coste adicional de 12 euros más caro que para un Boca-River de Superliga.
Según 'Clarín', la reventa de entradas para el partido de La Bombonera se sitúa en torno a las 4.500 euros.