Si no fuera porque se tiene que hacer a un lado por los estatutos del club, Josep Maria Bartomeu tendría cada vez más difícil repetir presidencia en el Barcelona. Eso sí, que el candidato continuista llegue preparado, pues desde la plantilla no se facilitará nada su desembarco.
Más bien al contrario. Los pesos pesados del vestuario del Barcelona están más que cabreados por la forma en la que se ha gestionado la última temporada desde las altas esferas.
'AS' informa de que en el club preocupa el silencio de Messi, Busquets, Piqué y Sergi Roberto, capitanes del equipo, a la propuesta de una reducción salarial del 30% durante el estado de alarma.
El medio confirma que todas las secciones tendrán una reducción del 70% y que el fútbol, de momento, se libra, pues el filial y los juveniles solo perderán un 30% del salario.
Esa cantidad es la que el Barcelona quiere que se reduzca el salario la primera plantilla, pero el grupo prefiere seguir la propuesta de la AFE de un 10% Con salarios tan altos como los que se manejan en 'can Barça', los jugadores creen que el 30% es una cifra exagerada. Y por eso nadie ha hablado en relación al posible ERTE.
Un silencio que incomoda al club y que no hace sino aumentar la distancia entre directiva y futbolistas, que ya había crecido con la no llegada de Neymar, la polémica con Abidal y el asunto de las redes sociales.
Casos, todos ellos, que ponen de manifiesto que los actuales jugadores no están del todo contentos con los actuales dirigentes y que no verían mal un cambio de aires en los mandos del club. Pero claro, eso será ya en 2021, en tanto que antes hay que resolver muchos otros asuntos. Sin ir más lejos, el del ERTE.