Posando junto a Dani Martínez, ex fisioterapeuta del Real Madrid e hijo de Pirri, Santiago Solari 'reapareció' en la esfera pública, tras dejar al Real Madrid sin objetivos en pleno mes de marzo.
Una debacle deportiva sin precedentes que acabó como su puesto y le motivó para abandonar la capital, poniendo rumbo a Ibiza para desconectar y alejarse de la fervientes críticas por su trabajo.
Tras 133 días al frente del primer equipo, el Real Madrid cesó a Solari para devolverle el timón a Zinedine Zidane. Una decisión que colocó al argentino en la diana de la ira blanca por la mala temporada.
Preso de la tensión, el argentino se recluyó en Ibiza, donde tiene una casa, para tratar de descansar y despejarse 19 semanas agotadoras por los resultados de su equipo.