El corazón de Piqué es azulgrana. Poco después de la necesaria victoria contra el Ferencvaros en el estreno de Koeman en la Champions League, el club anunció que renovó el contrato del central y de tres jugadores más. Pero lo que no se sabía era que Gerard se había sacrificado para facilitarlo.
Informa el diario 'Sport' de que aceptó un rebaja salarial de un 50%, es decir, de la mitad. Esto deja claro el compromiso del defensa para con el club de la Ciudad Condal, pues las últimas informaciones sobre la bajada de emolumentos que manejaba la directiva no llegaban a tanto. En resumidas cuentas, el futbolista se bajó el sueldo incluso más de lo que hacía falta.
Esto le vendrá de perlas a la entidad para resolver su actual situación financiera, que no es ideal. Incluso reconoció en un comunicado público que hubo enormes pérdidas por la crisis del coronavirus. De ellas nace que no se pudiera cerrar el fichaje de Memphis Depay, por ejemplo.
La rebaja del salario de Piqué no es la única condición no anunciada oficialmente de su contrato. 'Mundo Deportivo' apunta que, a partir de la temporada 2021-22, tendrá que jugar un mínimo de partidos que no ha trascendido para continuar en el equipo.