Stuani lleva la tranquilidad a Girona y acerca al Espanyol a la sombra del descenso

No hay forma de que este Espanyol sea capaz de reaccionar. El cuadro 'perico' llegó a Montilivi con tres derrotas consecutivas y con el agua al cuello por lo cercanía de la zona de descenso, pero los de Diego Martínez no fueron capaces ni de hacerle cosquillas a un Girona que está más tranquilo que nunca.

El cuadro de Míchel fue capaz de llevarse el botín de los tres puntos, lo que les permite tener una distancia más que considerable con el territorio caliente de la tabla (ocho puntos). Eso le da a los jugadores un mayor respiro para afrontar el resto de encuentros. Eso sí, sin dormirse en los laureles porque nunca hay que confiarse.

Si la sombra del descenso está un pelín lejos del Girona, el que la tiene muy cerca es el Espanyol. Los de Diego Martínez realizaron un partido francamente malo en todos los sentidos. Los 'pericos' se vieron superados en el juego por su rival y al menos fueron capaces de resistir durante todo el primer tiempo.

No hubo ni una sola ocasión clara durante los primeros 45 minutos. Los locales mostraron su poderío con la pelota y los que llevaron el peligro fueron Tsygankov, un incordio en el costado derecho, y Taty Castellanos, que no estuvo acertado en una serie de remates en el área espanyolista. El ucraniano tuvo una buena oportunidad, pero estrelló el balón en el lateral de la red.

El marcador seguía reflejando el 0-0 y hubo que esperar al segundo tiempo para ver algo de movimiento. Tras la reanudación, Pacheco tuvo que emplearse a fondo en un remate de Iván Martín dentro del área. Buena parada del portero, que no pudo evitar poco después el 1-0.

Acción a balón parado del Girona, despeje a la frontal de un jugador 'perico' y Arnau Martínez, con un control exquisito con la derecha, fusiló al guardameta con una volea que entró por el palo izquierdo. Golazo del lateral, que tiene solo una cláusula de rescisión de 20 millones de euros.

El Espanyol se vio contra las cuerdas y no daba sensación de que fuera a arreglar esto. Sin embargo, los de Diego Martínez, en su primer disparo a portería, igualaron el encuentro. Rubén Sánchez colgó la pelota en el área desde la derecha, Puado peinó y Braithwaite, que le ganó la partida a su marcador, metió el pie derecho para hacer el 1-1.

Con muy poco, el equipo 'perico' empató y eso le dio alas para apretar a un oponente que sufrió una expulsión previa al tanto visitante. Eso sí, la roja la vio Reinier, que estaba calentando en la banda cuando el árbitro se le acercó para enseñarle la cartulina.

El gol fue un mazazo para el Girona, pero los de Míchel se rehicieron a raíz de un despropósito de Sergi Gómez. El zaguero protagonizó una entrada criminal por detrás al Taty Castellanos en la medular y el colegiado, que le mostró la amarilla, finalmente cambió de parecer al acudir al VAR y lo mandó a las duchas ante la gravedad de la acción.

Y ahí llegó la puntilla para el Espanyol. Diego Martínez trató de minimizar los daños con el empate, pero Stuani, con pasado blanquiazul, se encargó de firmar el 2-1 definitivo en un penalti más que polémico. El árbitro indicó el punto fatídico tras un agarrón en el área de Vinicius Souza. 

El uruguayo, que llevaba apenas cuatro minutos en el campo, tomó la responsabilidad y transformó la pena máxima al engañar por completo a Pacheco. El charrúa llevó la tranquilidad a Girona y acercó a su ex equipo a la sombra del descenso.