El partido se aproximaba al minuto 40 cuando todo ocurrió. Rodri golpeó el tobillo de Kolasinac, cometiendo falta y viendo la amarilla. El defensor 'gunner' no pudo continuar, y pidió el cambio.
Su reemplazo, Saka, no estaba listo, por lo que el Arsenal tuvo que jugar con un jugador menos unos segundos. Y aquí llegamos al problema de fondo de este gol.
December 15, 2019
Los 'gunners' desperdiciaron la ocasión a balón parado, pero desde la banda su entrenador, el ex futbolista Freddy Ljungberg, dio la orden de seguir jugando. Nada de tirar el balón fuera.
Un honorable acto de valor por su parte, que le costó encajar el tercer gol. Porque en inferioridad, con un defensor menos, robó el City, recibió De Bruyne en la frontal, y con un disparo seco y raso batió a Leno para poner aún más tierra de por medio.
Mazazo, otro más, para el Arsenal, que comprobó que ser valiente no solo no está premiado en el fútbol, está castigado en muchas ocasiones. Sé valiente y honorable cuando te mides a un rival más débil que tú, no a un coloso con ganas de reivindicarse como es el Manchester City.
December 15, 2019