Take y Sorloth elevan al cubo la ilusión de la Real

La Real Sociedad está demostrando saber jugar al fútbol y hacerlo muy bien. No es casualidad que el equipo de Imanol Alguacil sea tercero en Liga y tenga grandes posibilidades de poder disputar la Champions League el año que viene. Y más viendo la exhibición fuera de casa en el RCDE Stadium.
El conjunto 'txuri-urdin' pasó por encima del Espanyol con buen juego, eficacia y, sobre todo, intensidad a borbotones. Los de San Sebastián están enamorando a cada vez más gente con su fútbol y su modo de luchar cada pelota en el terreno de juego, tal y como hicieron para cerrar la fecha 21 de Liga.
Comenzó mejor el cuadro 'perico', que tuvo en el 4' la primera clara del partido cuando Remiro sacó las dos manos para repeler el cabezazo de Calero. Tras eso, llegó la réplica de los vascos, que la tuvieron con un zurdazo desde la frontal de Oyarzabal que le hizo un extraño a Álvaro Fernández.
Pasado el minuto 20 se abrió la lata. Fue el japonés Take Kubo el que anotó el primero con un latigazo tremendo con su pierna dominante. Illarramendi puso un centro tenso hacia Sorloth, pero el que lo cazó fue el ex madridista, que controló y le pegó a media altura de forma violenta para reventar la red blanquiazul.
Apuntó el nipón tras el 0-0 ante el Real Madrid que le hacía falta más tranquilidad de cara a puerta y vaya si lo demostró. Acto seguido, los visitantes tuvieron en sus manos ampliar la ventaja con un cabezazo de Brais Méndez que salvó Cabrera bajo palos y con un zurdazo cruzado de Sorloth que se fue fuera por poco.
El paso por vestuarios mejoró, más si cabía, el juego de la Real Sociedad, que puso tierra de por medio gracias al delantero noruego, que por fin materializó una de sus llegadas. Una contra acabó en las botas de Oyarzabal, que centró raso desde la izquierda para que el nórdico rematara a placer para batir al meta 'perico'.
La actuación del Espanyol quedó evidenciada en la acción del 0-3, donde Take Kubo recortó en la derecha, centró y vio cómo Cabrera metió la cabeza para desviar la pelota y pillar a contrapie a Álvaro Fernández. El cancerbero tan solo pudo ver la pelota entrar al fondo de las mallas.
Los aficionados 'pericos' dijeron se acabó y empezaron a enfilar las escaleras del estadio para abandonarlo. Eso sí, todos ellos se perdieron la diana de Sergi Darder, que marcó el tanto del honor y le añadió picante al término final del encuentro.
El centro de Denis Suárez fue rematado por Javi Puado con la cabeza, pero Remiro hizo un vuelo sin motor para poner la mano a la altura del larguero y repeler el lanzamiento. La pelota se quedó muerta en la línea y ahí apareció el capitán para remachar a la red y maquillar el resultado.
Por su parte, el miedo se aumentó en el bando visitante con el 2-3 a poco de llegar al 90'. Una gran pared entre Lazo y Oliván fue finalizada por el lateral zurdo con un disparo potente y cruzado ante Remiro. Los 'txuri-urdines' acabaron pidiendo la hora en un partido que estaba ganado.
Finalmente, los de Imanol pusieron fin a una mala racha de tres encuentro consecutivos sin ganar (incluido el de Copa ante el Barça) y volvió a la senda del triunfo para seguir ilusionándose con poder escuchar el himno de la Liga de Campeones en el Reale Arena la próxima temporada.