Desde la llegada de Thomas Tuchel al banquillo del Chelsea, Thiago Silva ha pasado a convertirse en una de las piezas más importantes en la zaga 'blue'. A sus 36 años, el central brasileño ha disputado 33 partidos entre todas las competiciones.
Para la final de la Champions League, formó atrás con Rüdiger y César Azpilicueta. No obstante, cuando habían transcurrido 38 minutos de juego, el ex del PSG se lanzó al suelo con visibles muestras de dolor.
Las asistencias salieron a atenderle y, tras una primera inspección, se tomó la decisión de mandarlo al banquillo, para que entrase en su lugar Andreas Christensen.
El de Río de Janeiro se fue del terreno de juego de Do Dragao con lágrimas en los ojos, consciente de la importancia del duelo. Por suerte para él, apenas 180 segundos después, Havertz anotó el 0-1 para su equipo.
May 29, 2021