El Celta de Vigo, después de ceder un tiempo a Santi Mina al Al Shabab -el equipo que acaba de fichar a Yannick Carrasco- para apartarle en lo que buscaba un resquicio legal en fin de rescindir su contrato, acabó haciéndolo unilateralmente. Desde entonces, el jugador está en búsqueda de un equipo y ha estado a punto de conseguirlo en la Serie B, la Segunda División de Italia, con la Sampdoria, pero la operación se ha frustrado a última hora.
'La Repubblica' cuenta que, después de que las negociaciones con la directiva estuvieran muy avanzadas para su incorporación como agente libre, los 'tifosi' se quejaron hasta hacer saber a su presidente, Andrea Radrizzani, de que el jugador está condenado a 4 años de cárcel por abusos sexuales. Como consecuencia de sus acciones en el pasado, el mandatario ha accedido a la petición de su afición y ha dejado de lado el asunto.
Se trata de un mazazo par la carrera del ex del Valencia, que vislumbraba la posibilidad de continuar con su trayectoria a las órdenes de una leyenda del 'Calcio', Andrea Pirlo. De haberlo logrado, encararía esta temporada con el objetivo de ascender a la categoría de oro, pero la sensación, dada la información del periódico mencionado en el párrafo anterior, es de que deberá explorar vías más exóticas.
La Sampdoria, en este arranque de campaña, se encuentra en la 15ª plaza de la Serie B tras cosechar una victoria, 2 derrotas y un empate. Los resultados son pobres teniendo en cuenta que esta entidad está recién descendida, así que debería entrar en la lista de favoritas para rebotar hacia Primera División lo antes posible. Su próxima oportunidad de remontar el vuelo será el lunes 18 de este mes contra la Cittadella.