Sólo ha jugado once partidos, de los cuáles fue expulsado en dos (las dos primeras de su carrera). Escaso bagaje para un futbolista acostumbrado a ser titular.
Su actual contrato expira en junio, con lo que desde ayer, lunes 4, puede negociar con cualquier club que desee su incorporación para la próxima temporada.
Y al parecer, eso es lo que ya está haciendo. Su padre y representante, al parecer, se encuentra escuchando ofertas de Lazio y Bologna.
Si las negociaciones prosperasen, no sería descabellado que el Málaga aceptase una cesión hasta fin de temporada del futbolista, para evitar hacerse cargo de la ficha de alguien que no seguirá la próxima campaña.