Boca llegó al estadio Presbitero Bartolomé Grella sabiendo que estaban clasificados matemáticamente para la siguiente ronda de la Copa de la Liga Profesional Argentina. Es por ello que Russo planteó sobre el verde un once plagado de suplentes, dejando en el banquillo a hombres importantes como Rossi, Buffarini o Jara.
Enfrente, un Club Atlético Patronato que llegó a esta decimotercera jornada como último clasificado y que necesitaba el triunfo para salir de esta posición. Finalmente, los de Delfino lograron llevarse los tres puntos en un partido que se podría catalogar como soporífero.
Y este adjetivo viene motivado por lo que se vio durante los 90 minutos en Paraná. Un encuentro en el que las ocasiones, la velocidad y el empuje ofensivo brillaron por su ausencia. Quizá con justificación dados los reseñados precedentes, pero la realidad es que así fue.
Durante la primera parte no hubo un dominador claro. Lo mejor, una vaselina que intentó Arias desde 30 metros a la que respondió magistralmente García; de no haber sido así, probablemente habríamos estado ante el gol de la jornada. Cuando se acercaba el descanso, Gissi lo intentó tras una jugada embarullada, pero su disparo se marchó ligeramente alto.
El segundo tiempo, contra todo pronóstico, siguió la tónica del primero. Mucho juego horizontal y protagonismo absoluto de los centrales de ambas escuadras a la hora de pasarse el balón entre ellos.
El empate parecía ya firmado. No obstante, fue en ese momento cuando Torres aprovechó la suya para adelantar al 'Patrón'. Gran centro de Urribarri y el cabezazo posterior terminó alojándose en las mallas para materializar la primera y última diana del choque.
Con este resultado, el 'Xeneize' se mantiene en segunda posición de la Zona B a falta de lo que haga Talleres; mientras Patronato escala hasta la décima posición con 12 unidades.