Porque Filipe Luis cree que todos los futbolistas, más o menos, suelen cometer las mismas locuras. "Casi todos cometemos los mismos errores. Yo también tuve mis momentos de salir o beber más de lo que debía. Por suerte, mi padre me devolvió al camino", confesó.
Y explicó qué hizo con su primer sueldo como jugador profesional. "Me compré un coche. Costaba más d elo que cobraba y mi padre tuvo que ayudarme a pagarlo. Cuando creces, te das cuenta de que ya puedes ser Maradona que esto se acaba para todos...", expresó.
¿En qué momento se dio cuenta del rumbo que debía tomar? "Vi la luz cuando me di cuenta que podía ser alguien importante en el fútbol. Fue cuando conocí a Lotina en el Dépor. Con él entendí que, si no maduraba, iba a ser uno más", continuó.
El resto de la historia ya la conocen. Filipe Luis se centró en el fútbol y triunfó. El brasileño no dudó en dar las gracias a su padre por haberle llevado por el buen camino.