El Almería no es el mismo que el del inicio de curso. En estos momentos el equipo de Rubi languidece debido a los malos resultados que ha cosechado en este inicio de 2022. Ni tan siquiera ha ganado un partido todavía.
El diario 'AS' cuenta que las lesiones y la falta de puntería en los últimos metros son factores que condenan a un club que lideraba con mano de hierro la Liga SmartBank, pero que ahora se sitúa en el segundo puesto, superado por el Eibar.
La dinámica positiva de los 'indálicos', que consiguieron encadenaron diez partidos sin perder, se truncó cuando debían enfrentarse al Lugo, un duelo que se suspendió debido a la ola de contagios de COVID-19 que azotó al equipo de Rubén Albés.
Tras el parón navideño, el equipo de Rubi se vio también afectado por el virus y varios de sus jugadores cayeron, entre ellos el delantero Juan Villar. Además, las bajas en ataque se acumularon: Umar Sadiq tuvo que marcharse a disputar la Copa África con Nigeria mientras que Dyego Sousa se lesionó ante el Cartagena.
Un cúmulo de circunstancias que se ha visto reflejado en las estadísticas ofensivas del equipo. El Almería, que era el equipo más goleador de Segunda, tan solo ha marcado tres tantos en los cinco primeros partidos del año y lo que es peor, no ha sido capaz de dejar su portería a cero en los últimos once duelos.
Un equipo a la deriva, que únicamente se aferra a la vuelta de Sadiq, que regresará a la disciplina de los 'ilicitanos' el próximo jueves, según explica 'AS', tras caer eliminado de la Copa África.