El Bilbao Ahtletic-UD Logroñés, que ha terminado 1-1, no ha sido un partido normal, ni mucho menos, ya que es poco usual que el colegiado del encuentro se lesione.
Aunque aún más extraño es que un árbitro que estaba en la grada tenga que hacer de asistente. Eso fue lo que ocurrió en Lezama tras la lesión del trencilla principal del encuentro, Alfonso Vicente Moral.
A los ocho minutos de juego, el colegiado se ha acercado a la banda para informar de que no podía continuar. Veinte minutos ha estado detenido el partido, hasta que un asistente se ha colocado como árbitro principal y un colegiado que estaba en el público ha pasado a ser juez de línea.
Se reanudará el partido en el minuto 8. Un árbitro que se encontraba en la grada se pondrá como linier para lo que resta de encuentro. pic.twitter.com/b3wQvLdMwE
— UD Logroñés (@UDLogrones) 19 de febrero de 2017