Tras la lucha inocua por el subcampeonato del sábado llegó la pelea por la permanencia en la Serie A. Lecce y Genoa se la jugaban cada uno en sus partidos y los segundos, que dependían de sí mismos, parecieron encarrilar su salvación en media hora de partido.
El equipo de Davide Nicola se encontró por fortuna con la versión goleadora de Tony Sanabria. Un doblete exprés (en cuestión de diez minutos) del delantero paraguayo ponía un 2-0 que daba tranquilidad a los genoveses.
El primer tanto llegó a los 13 minutos de juego. Un centro desde la derecha de Lerager encontró el cabezazo limpio de Sanabria, que primero miraba al juez de línea y luego, aliviado, celebraba con sus compañeros.
Poco después, en el 25', apareció el incombustible macedonio Goran Pandev para asistir a Sanabria, que nuevamente definió al fondo de las mallas. Un soplo de aire para el Genoa, una condena en ese momento para un Lecce que tampoco hacía su parte y caía por 0-2 ante el Parma a la media hora.