Un estudiante de INEF, a punto de convertirse en segundo entrenador

El viaje cuenta con apoyo incondicional de sus padres y hermano, y aunque reconoce que algún amigo no lo ve claro, Jordi Aluja admite a EFE que va a cumplir un sueño, no tanto por ser Camboya el destino, sino por "salir fuera y conocer el fútbol que se practica en el mundo".
Recala en Camboya, en la ciudad turística de Siem Reap, donde una empresa japonesa patrocina al equipo de la ciudad y desde el año pasado ha dado el visto bueno para que entrenadores europeos doten de talento el fútbol poco virtuoso y carente de orden de los camboyanos.
Jordi Aluja ha sido el elegido porque el primer entrenador, Oriol Moedano, fue autorizado para contar con un ayudante de su confianza y éste pensó en un compañero de pupitre mientras ambos se sacaban el título de entrenador.
En la primera llamada de Moedano, natural de Creixell (Tarragona), a Aluja, éste mostró sus dudas y su negativa. Posteriormente, se lo repensó y, a pesar de que el primer técnico ya le dijo que tenía a alguien en cartera, cuando llegaron a un acuerdo, a los dos días Jordi ya tenía los billetes en casa para el viaje hacia una Liga que se pondrá otra vez en marcha en marzo.
"A pesar de las dudas, tengo la mentalidad muy amplia y tenía claro que quería vivir mi sueño", ha señalado a EFE el joven entrenador, quien a los quince años tuvo claro que quería ser preparador, para lo cual compaginó el banquillo con sus tareas de futbolista, primero como portero y después como jugador de campo.
Como futbolista jugó en el Cambrils, Torreforta y Floresta, mientras que de técnico ha dirigido a equipos como Cambril, Sant Cugat y Vilaseca, entre otros, además de pasar un año en el CAR de Sat Cugat.
Estudia INEF en Lleida, pero tiene claro que esta oportunidad de trabajar en Asia hace que el mundo a su alrededor se detenta en seco para vivir esta experiencia.
"En Camboya la Liga está en desarrollo, y tiene unos quince años de vida. Seguro que será un choque cultural, pero ellos han hecho una apuesta fuerte por llevar entrenadores europeos para crecer. A Oriol le salió la oportunidad, después de haber estado por Suiza y Finlandia, y me llamó para que lo acompañase, aunque él ya lleva meses allí", ha relatado.
El joven exjugador y ahora segundo entrenador viaja a Camboya con un contrato de dos años y "me ofrecen todas las comodidades" para que sólo se ocupe del fútbol. Tendrá una ficha, casa, vuelos, traslados al campo, un seguro médico en un hospital japonés y clases particulares en inglés, ya que disponen de intérpretes para tratar con los jugadores.
"Me ha comentado Oriol que son jugadores impulsivos y con poco orden táctico. Nada que ver con el juego de posiciones de Josep Guardiola. La idea es poner orden. Nos han dado las llaves del equipo para hacer y deshacer, para salir del medio de la tabla y dejar de soñar con los 'playoff', para entrar en ellos", ha añadido Jordi Aluja, quien considera que en Camboya "tienen mucho respecto a los occidentales".
Aluja ha recordado que después de llegar a un acuerdo con el primer entrenador, para ser su ayudante, los responsables del Cambodia Tiger mantuvieron con el joven preparador una charla por Skype, que resultó definitiva para que aceptase la propuesta.
El club camboyano milita en la primera división, compuesta por doce equipos, que arranca en marzo. Además, los clubes participan en la Copa del país. El año pasado, con la llegada de Oriol Moedano, el equipo camboyano, en zona de descenso, logró salvar la categoría y ubicarse en la zona media.
Además de la ocupación como entrenador, ambos preparadores llevarán a cabo promoción del fútbol por todo el país bajo el lema "Un niño y una pelota".