El fútbol le dio grandes momentos defendiendo elásticas como las del Glasgow Rangers o el Zenit de San Petersburgo. La vida, sin embargo, le deparó el peor partido posible: Esclerosis Lateral Amiotrófica.
La enfermedad degenerativa le ha ido convirtiendo en una persona cada vez más débil físicamente. De hecho, está postrado en una cama y se expresa a través de un ordenador. Por ello, anunció su última aparición en público.
"Hola, tengo una noche especial el 28. Ya que se está poniendo muy difícil para mí, esa será mi última noche. Ven y haz de esto una noche para recordar. Espero verte pronto", se pudo escuchar de la voz que genera su inseparable ordenador para motivar a la gente.
Ricksen llegó a ser internacional con Holanda en una docena de ocasiones y, aparte de luchar contra el ELA, a diario intenta concienciar sobre las ayudas que hacen falta para intentar erradicarla.
9 de junio de 2019