Dos equipos eléctricos se vieron las caras por una victoria que se pagó cara y en la segunda parte. Rui Vitória y Bruno Génésio sacaron potencial y exhibieron músculo en sus onces titulares con jugadores de la talla de Mariano, Pizzi, Ruben Dias, Mariano, Depay, Ndombele... que no tardaron en sacar a la luz su calidad y asediar a la portería rival.
El ángel de la guarda del Benfica fue Vlachodimos. El portero lo paró todo hasta los últimos minutos de la primera parte y salvó al conjunto portugués de una temprana goleada. Su actuación, de diez hasta que su fuerte aguantó, empezó despejando un buen centro de Mariano.
El ex del Real Madrid se montó en la moto y dejó atrás a su par para contestar a un cabezazo de Ruben Dias que se marchó por muy poco por encima de la portería del Olympique de Lyon.
No había tiempo para el descanso en un rectángulo que fue más un ring. Incluso Depay se llevó la tarjeta amarilla y acabó empujando al árbitro al pedirle explicaciones. Tal era la temperatura del encuentro que el 'Toto' Salvio la descargó con un trallazo que impactó en la madera, y no iba a ser el único.
Pero el Lyon se acabó adelantando con un tanto de Marcelo de cabeza tras un córner y una gran jugada de Traoré, que batió a Vlachodimos con un toque sutil y dirigido al palo largo.
La segunda parte no perdió fuelle a pesar del carrusel de cambios. Pizzi avisó con otro disparo al poste hasta que acabó metió la pierna para rematar un pase de la muerte de Salvio. El empate llegó gracias a Marcelo, que fue héroe y villano, al intentar despejar un balón envenado. En el fuego cruzado ganó el Lyon con el tanto último de Terrier.