El capitán del Watford, Troy Deeney, goleador ante el Manchester United este fin de semana, pudo celebrar con ellos el tanto del momentáneo empate ante los 'red devils', anotado por él mismo.
Deeney coincidió con ellos en la cárcel al cumplir una pena de tres meses por una pelea con cuatro estudiantes en 2012. La gran amistad que mantiene con ellos ha posibilitado esta invitación un tanto peculiar.
Sin embargo, el futbolista del Watford tiene claro que no quiere volver a pasar por lo mismo. "Volver a la cárcel no es una opción. Pase lo que pase, no va a volver a suceder", aseguró.
Lamentablemente, Deeney no pudo celebrar con sus amigos un resultado positivo, pues después de conseguir el empate desvió un chut de Schweinsteiger que supuso el 1-2 definitivo para el Manchester United.