Un querer y no poder

Fracaso absoluto del conjunto 'verdolaga' en esta edición 2018 de la Libertadores. Jorge Almirón llegó para intentar repetir la hazaña de Reinaldo Rueda en el 2016, pero se ve fuera de combate en octavos de final.
Uno de los objetivos del club era volver a levantar esa Copa tan preciada y ahora tendrá que ver el desenlace por televisión. Gran parte de culpa recae sobre el pésimo partido de ida en Tucumán, donde los argentinos fueron superiores (2-0).
A pesar de ofrecer una versión bastante mala, los aficionados de Nacional arroparon a los suyos, pero se llevaron un auténtico fiasco. Todo pintaba color de rosa cuando Duarte mandó el balón a la red tras un gran centro de Vladimir Hernández.
El atacante metió la punta de la bota en el segundo palo para hacer el 1-0 y dejar la eliminatoria a tan solo un gol. El primer paso estaba hecho y falta lo más difícil: volver a marcar.
Dominio total y errando ocasiones
Atlético Nacional tenía el control absoluto del partido, ya que Tucumán se limitaba a esperar a su rival para intentar salir a la contra en cualquier robo de balón. El 'Decano' tuvo algunos acercamientos siendo el más claro el que se dio en la segunda parte.
Antes, Lucchetti empezó a aparecer para alegría de su equipo. El cancerbero metió varias manos providenciales que evitaron goles cantados Felipe Aguilar y Aldo Leao Ramírez no dieron crédito ante las buenas intervenciones de su oponente.
Tras la reanudación, el guion no cambió. Conforme pasaron los minutos, los de Almirón aumentaron el ritmo y se acercaron con mayor frecuencia en campo contrario. Aguilar tuvo otra ocasión muy buena, que volvió a errar. El central mandó el balón a las nubes tras estar completamente solo.
En los instantes finales, Atlético Tucumán pudo haberse llevado la victoria, pero Vargas estuvo atento en un mano a mano ante Leandro Díaz. El encuentro no dio para más y el Atanasio se vino abajo. Otra vez eliminados a las primeras de cambio.