El fútbol femenino volvió a dar un nuevo paso adelante. La final del torneo mundial disputado en Francia volvió a batir todos los récords que se habían situado desde que entramos en el segundo milenio.
Y es que el evento no solo ha resultado todo un éxito a nivel de cobertura mediática y retransmisión televisiva. Además el público no ha fallado en los partidos y mucho menos en la final.
Conforme se iban acercando las eliminatorias los estadios se iban llenando. Los partido de Francia y Estados Unidos siempre contaban con una buena participación por parte del público.
Hasta que se llegó a la final. Se rompieron todos los datos de este siglo. 57.900 espectadores vivieron el partido desde las gradas. Se convirtió en tercer partido de fútbol femenino con más publico de la historia. Solo por detrás de las finales de los Mundiales de 1999 y 1991.