El Grupo D de clasificación para la Eurocopa tiene un claro color rojo, y no por el de la República Checa, sino por una España convincente y con varias claras señas de identidad.
Llegaban empatadas ambas Selecciones a tres puntos, después de las contundentes victorias ante Moldavia (en el caso de la República Checa) y frente a Azerbaiyán (por parte de España).
Festival goleador el que se pegó el combinado español, con un 1-5 que reflejó el contundente dominio de principio a fin. De hecho, a los once minutos, el partido ya iba 0-2.
En primer lugar, Sedlackova metió la cabeza donde no debía e introdujo el balón en su propia portería. A los cinco minutos, contragolpe de Mariona y definición perfecta para encarrilar el triunfo.
Llegados al ecuador del primer tiempo, España seguía mandando en el aspecto territorial con una presión alta que permitió generar muchas ocasiones de gol. En el 23', Aitana cazó un remate en semifallo de Alexia para regatear a Votikova y anotar.
El 0-4 se pospuso hasta el 35' de juego, cuando Irene Paredes domó un balón rechazado en el área para, con el interior del pie y toda la suavidad del mundo, encajar el esférico casi en la escuadra.
Intentó despertar una República Checa que estaba maniatada por completo. Las oportunidades fueron desapareciendo hasta que Jenni Hermoso amenazó con un excelso taconazo al primer palo, pero a la jugada siguiente no perdonaría.
Desmarque fabuloso, control espectacular y definición de pura 'killer' para la delantera del Barcelona. Las locales maquillaron finalmente el resultado con el gol de Vonkova. Una España arrolladora reina por Europa.