Unzué dio por bueno el punto

"Igual en los últimos minutos la sensación que ha quedado por lo ocurrido es que podíamos haber ganado, pero no hubiese sido justo. En la primera parte el Athletic creó alguna ocasión más y es imposible jugar los 90 minutos como los últimos diez. Asumimos muchos riesgos que nos dieron opciones de ganar, pero también pudimos encajar algún gol", resumió el técnico navarro.

Para Unzué lo más positivo del partido frente al Athletic es que "la posibilidad de pelear por Europa" está todavía "en manos" del Celta, si bien admitió que "para conseguirlo" van a tener que "mejorar" su juego, especialmente el de ataque.

"No tenemos ese punto de confianza y seguridad que nos permitía hacer ocho o diez ocasiones, pero a pesar de todo el equipo sigue siendo competitivo", dijo.

Cuestionado, por otro lado, por las tres acciones en las que los jugadores locales han reclamado penalti, Unzúe comentó que desde su posición, "con sinceridad" ninguna de ellas le parecieron "jugadas como para pitar penalti".

Por último, se le ha pedido a Unzué su opinión sobre la situación de su colega en el banquillo rojiblanco, y además amigo, José Ángel Ziganda, muy cuestionado en Bilbao.

"Era un año muy complicado (para el Athletic), con tres competiciones y una plantilla con algunas bajas importantes que han condicionado el juego. Se puede decir que son excusas, pero son situaciones reales que han ocurrido y que dificultan que se puedan sacar más puntos", explicó.

El entrenador del Celta estableció además un paralelismo entre su temporada y la de Ziganda. "Han sido dos equipos que tuvieron éxito anteriormente, y necesitamos un tiempo para hacerle ver a la gente que, de otra manera, somos capaces también de conseguir esos resultados", concluyó.