Hace no tantos años el Madrid ganaba partidos, y no pocos, gracias al '1' y al '9'. O lo que es lo mismo, a Iker Casillas y Ronaldo Nazario. Dos leyendas que hacían de las suyas en un Madrid repleto de galácticos. Dos figuras claves que marcaron una época en el conjunto blanco.
Y es que el delantero brasileño llegó en 2002 a la casa blanca para marcar más de 100 goles con el Madrid y levantar dos Ligas y una Intercontinental. Por su parte, pocos han inmortalizado su leyenda en el Santiago Bernabéu como Casillas. Había muchas estrellas, pero ellos resolvían gran parte de las papeletas.
Ahora, años después, el Barcelona recurre a esa fórmula. No necesitó más en 'La Catedral' que recurrir tanto a Messi como a Ter Stegen, en este caso el '10' y el '1'. Pocos comparten cartel con el astro argentino, que ve desde la otra punta del campo como el portero alemán es un seguro de vida para la portería azulgrana.
En buena medida, el rendimiento de los dos está llevando en volandas a un Barça de Valverde que pocos esperaban que volara tan rápido y tan alto. Los números lo dicen todo: Messi es el máximo goleador de la Liga, mientras que Ter Stegen es el portero con menos goles encajados.
El alemán sólo ha recibido tres goles en contra en las 10 primeras jornadas, y ya es el actual 'Zamora' de la Liga. Por su parte, Messi sigue a lo suyo y aspira a hacerse con otro 'Pichichi' gracias a sus 12 goles, tres más que su inmediato perseguidor, Zaza.
Los dos 'galácticos' del Barça repiten una fórmula que al Madrid le funcionó en el pasado.