Varó y Edgar repartieron los puntos

Las piezas se colocaron en el tablero y los de Eloy Jiménez mostraban un mayor control y calidad con el balón en los pies. Los pupilos de Pacheta llevaban el protagonismo a la hora de generar peligro, pero se basaban mayormente en avanzar rápidamente y les sirvió de mucho, pues atacaron más.

Iván Sánchez rompió el hielo desde fuera del área con un disparo que golpeó en un rival. Los locales insistieron en generar ocasiones, aunque fueran de poco peligro, ante un cuadro gallego que no tiró a puerta en toda la primera mitad. Solo Gerard Valentín logró generar algo de peligro con una conducción en el área.

La veteranía y la experiencia de Nino se hicieron presentes cuando el capitán cabeceó con potencia al fondo de las mallas de la meta de Varó un centro de Juan Cruz. Desde entonces, los suyos fueron mejores sobre el verde y se organizaron a las mil maravillas para que sus rivales no pudieran realizar avances.

Borja Domínguez le puso solución pronto a la incapacidad de su equipo para acercarse a Edgar. Le pegó desde muy lejos y puso en serios aprietos al portero, que pudo despejar el disparo con una buena estirada. Parecía que, desde entonces, los albivermellos se vendrían arriba, pero no fue así.

Los valencianos le dieron la vuelta a la situación y volvieron al dominio del duelo. Iván Sánchez consiguió forzar un penalti que le hizo Seoane por una entrada por detrás. El '10' erró la pena máxima, pues le dio al palo, y dejó el enfrentamiento en el aire con posibilidades de empate.

Lo pagaron caro, pues Borja Domínguez volvió a aparecer para firmar el empate. Hubo mucho mérito de Barreiro, que dejó pasar un centro lateral entre sus piernas para habilitar al centrocampista, que empaló la pelota en la portería de Edgar sin que este pudiera hacer nada.

En la recta final del enfrentamiento, ambos conjuntos tuvieron ocasiones de llevarse la victoria, pero ninguno lo hizo. La clave estuvo en la imprecisión y el buen hacer de los dos porteros, Varó y Edgar, que estuvieron soberbios. Eso sí, el visitante estuvo un escalón por encima.