La salida de David Beckham del Manchester United fue una de las rupturas más icónicas de la historia del fútbol inglés. El 15 de febrero de 2003 se acabó el camino de ambos después de un altercado entre el futbolista y el entrenador de aquel entonces, Sir Alex Ferguson.
Aquel día, el Arsenal venció y eliminó a sus rivales de la FA Cup en un duelo en el que el técnico alineó su mejor once. Lo noticioso ocurrió después del pitido final, ya que el preparador entró furioso en el vestuario y pateó una bota que le abrió una pequeña herida a Beckham, que necesitó de varios puntos.
Esto fue un punto de inflexión en la relación de ambos, que acabría de la peor manera posible y con el inglés en el Rea Madrid. Carlos Queiroz, segundo de Ferguson en aquel entonces, aclaró lo sucedido en una entrevista para 'FourFourTwo' y matizó la historia.
"Es hora de contar la verdad de esta historia. Sir Alex tenía muchísima calidad en su pie izquierdo. No fue un buen lanzamiento porque la bota primero tocó la mesa y solo después fue directa hacia Beckham. Lo siento, Sir Alex, pero tu pie izquierdo no es tan bueno como crees", aseguró el portugués.