Si algo no se le puede echar en cara a Arturo Vidal es falta de sacrificio. El futbolista chileno lo da todo cada vez que salta al campo y siempre va a por todos los balones divididos que se encuentra.
En esta ocasión, le tocó jugarse el tipo en una acción defensiva. El centrocampista no lo dudo y puso todo su cuerpo delante de la portería para detener un disparo de Antoñino a bocajarro.
El chileno fue uno de los más activos en la parcela defensiva del Barcelona y su trabajo en la recuperación de balones permitió a los 'culés' aguantar mucho mejor los intentos del Valladolid.
Sin Arthur, Vidal tuvo mucha libertad en la medular y persiguió el balón como un perro de presa. Realizó cinco entradas con éxito y recibió tres faltas que también le permitieron ganar la pelota cuando no estaba en su poder.
Además, su efectividad en el pase fue muy alta. De un total de 78 intentos, logró llevar a su destino 72. Se encargó de controlar las llegadas de jugadores muy peligrosos como Guardiola o Daniele Verde.
En definitiva, Arturo Vidal fue uno de los principales activos del Barcelona en el centro del campo. Y lo ha hecho días antes de que el Barcelona se enfrente al Olympique de Lyon. El chileno quiere ganarse a Valverde.