Parecía que Barracas Central 'tan solo' iba a encajar tres goles de Atlético Tucumán en la decimoquinta fecha de la Liga Argentina cuando a Mateo Coronel se le ocurrió una diablura. Desde su propio campo, puso a prueba a Gagliardo con un misil sensacional.
El futbolista local detectó que el guardameta contrario no estaba en el mejor lugar posible, así que le retó con un disparo muy potente y elevado que acabó en el fondo de sus mallas sin que él pudiera hacer nada. Dio la vuelta al mundo.