Así son las eliminatorias a partido único. No hacen prisioneros. Sale cara o cruz. Y así, mil tópicos más que podríamos formular para hablar de lo que sucedió en la prórroga de la final de la Copa Libertadores.
Palmeiras y Flamengo llegaron al tiempo extrarreglamentario tras haber empatado a uno en los primeros 90 minutos. La tremenda igualdad hacía pensar que se podía llegar a la tanda de penaltis, pero la Diosa Fortuna decidió coger otro camino.
En el 95', el centrocampista Andreas Pereira bajó a ayudar en la salida de balón. Sin embargo, en su intento de combinar con algún compañero, no se dio cuenta de que Deyverson se encontraba muy cerca.
El que fuera delantero del Alavés aprovechó que el brasileño perdió el balón para plantarse completamente solo ante la meta de Flamengo, convirtiendo de esta forma el 2-1, tanto que a la postre serviría para darle el título al 'Verdao'.